27 de mayo de 2012 (Juan, 20, 19-23)
Poco a poco, vamos aprendiendo a vivir sin interioridad. Ya no
necesitamos estar en contacto con lo mejor que hay dentro de nosotros.
Nos basta con vivir entretenidos. Nos contentamos con funcionar sin alma
y alimentarnos solo de pan. No queremos exponernos a buscar la verdad. Ven Espíritu Santo y libéranos del vacío interior.
Ya sabemos vivir sin raíces y sin metas. Nos basta con dejarnos
programar desde fuera. Nos movemos y agitamos sin cesar, pero no sabemos
qué queremos ni hacia dónde vamos. Estamos cada vez mejor informados,
pero nos sentimos más perdidos que nunca. Ven Espíritu Santo y libéranos de la desorientación.
domingo, 27 de mayo de 2012
sábado, 19 de mayo de 2012
Septimo Domingo de Pascua
Los evangelistas describen con diferentes lenguajes la misión que Jesús confía a sus seguidores. Según Mateo, han de “hacer discípulos”
que aprendan a vivir como él les ha enseñado. Según Lucas, han de ser
“testigos” de lo que han vivido junto él. Marcos lo resume todo diciendo
que han de “proclamar el Evangelio a toda la creación”.
Etiquetas:
Evangelio del Domingo
sábado, 5 de mayo de 2012
Evangelio Quinto Domingo de Pascua
6 de mayo de 2012 (Juan 15, 1-8)
Según el relato evangélico de Juan, en vísperas de su muerte, Jesús revela a sus discípulos su deseo más profundo: "Permaneced en mí".
Conoce su cobardía y mediocridad. En muchas ocasiones les ha
recriminado su poca fe. Si no se mantienen vitalmente unidos a él no
podrán subsistir. Las palabras de Jesús no pueden ser más claras y
expresivas: "Como el sarmiento no puede dar fruto por sí mismo, si no
permanece en la vid, así tampoco vosotros si no permanecéis en mí". Si
no se mantienen firmes en lo que han aprendido y vivido junto a él, su
vida será estéril. Si no viven de su Espíritu, lo iniciado por él se
extinguirá.
Etiquetas:
Evangelio del Domingo
Suscribirse a:
Entradas (Atom)