domingo, 20 de noviembre de 2011

Nuestra Fundadora: M. Mª Jesús Herruzo Martos


        Maria Jesús nació el 19 de enero de 1896 en Villa Nueva de Córdoba. Fue la primera de los hijos del matrimonio formados por Matías Herruzo Moreno y Doña Carmen Martos Herruzo. Que tuvieron otros 3 hijos más.
      La familia a la que María Jesús pertenecía era muy cristiana y comprometida con su fe en Jesús. Contaba con recursos económicos que les permitían ayudar a los necesitados y hacer obras de caridad. Esto influyó mucho en María Jesús que fue formando su personalidad en una gran generosidad de corazón.
     Ella no tuvo mucha oportunidad de convivir con sus padres, pues fueron sus tías las encargadas de cuidar de ella durante su infancia, hasta que ingresa como interna en el colegio de las Esclavas del Sagrado Corazón; donde pasó varios años aprendiendo no sólo nociones de cultura general, sino que también echó los pilares de sus dos grandes vocaciones: el Corazón de Jesús y la Virgen. Fue una niña normal, que no resaltó de forma notoria por encima de las demás compañeras. Amiga de sus amigas, cumplidora de sus obligaciones y con una vida espiritual que ya tomaba muy en serio. Tuvo que dejar su vida de escolar al fallecer su madre, pues al ser  ella  la mayor se ve obligada a dejar sus estudios y regresar junto a su padre y hermanos.
         En estos años de adolescencia María Jesús siente inclinación a la vida religiosa, que ella va cultivando con su vivencia cristiana. Pero esta incipiente vocación se ve truncada al  entablar una relación de noviazgo que durará 4 años contrayendo matrimonio en 1918.
Fue una fiel esposa y vivió su unión matrimonial con responsabilidad y cariño, a pesar de las muchas dificultades, pues su marido enfermó al poco tiempo de casarse y a los 9 años de casada se quedó viuda y con 3 hijas, una cuarta murió también siendo pequeña, cuando aún vivía su marido.
          Los años venideros fueron difíciles para María Jesús pues tenía que hacer frente sola a la educación y crianza de sus hijas, además de velar por los bienes de la familia…
        Pero poco a poco fue ocupándose de otras actividades en las que se sentía realizada: organización de ejercicios espirituales, colaboración en misiones populares, atención y cuidado de las personas que trabajaban a su cargo, etc. Todo esto acompañado siempre por largos espacios de oración personal y cuidado de su vida interior.
      Poco a poco fue surgiendo en ella un hondo deseo de dar a conocer a Jesús y principalmente en esos pueblos pequeños o campos donde las personas carecen de medios. Por eso, cuando el P. Castro, antiguo conocido de la familia, le habló de la posibilidad de fundar una obra para tal fin, ella se lanzó decidida a iniciar dicha empresa, pues resurgía con fuerza la vocación que siempre tuvo de consagrarse a Dios y a su Reino.
           El 15 de noviembre de 1940, después de hacer ejercicios espirituales junto con un grupo de mujeres deseosas de entregarse a Dios comienzan, bajo la dirección del Padre Castro la Congregación de Obreras del Corazón de Jesús, cuyo fin es la evangelización de las personas que menos posibilidades tienen de los pueblos, campos y ambientes desatendidos. Con tal fin las primeras Obreras, al igual que hoy, trabajaban en las Parroquias, colaboraban en las misiones populares, organizaban tandas de Ejercicios Espirituales y se empleaban en las catequesis de niños y adultos. Visitaban enfermos y preparaban para recibir sacramentos.
       María Jesús, pasó el resto de su vida hasta que se lo permitió su salud al frente de la Congregación, velando, guiando, animando y acompañando a las integrantes de esta incipiente Obra, a la que amó profundamente, pues sabía que era un instrumento de gran valor para extender el Reino, para que otros puedan conocer y amar a Jesús.
         Murió en Villanueva de Córdoba el 23 de Marzo de 1965.

1 comentario:

  1. "La mies es mucha y los obreros pocos" La llamada está la decisión es tuya.

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